miércoles, 3 de septiembre de 2008

Andrew Bard Schmookler

La única maldad del psiquismo humano consiste en no poder unir o reconciliar los distintos fragmentos de nuestra experiencia.

Cuando aceptamos todo lo que somos –incluida la maldad- hasta el mismo mal se transforma.

Cuando logramos armonizar las distintas energías de nuestro psiquismo, el rostro sangriento del mundo asume el semblante de la Divinidad.

No hay comentarios: